El director del equipo M-Sport, Richard Millener, pretende que sus pilotos encaren con un enfoque más positivo la cita en Turquía tras la modesta prueba ofrecida en Estonia.
Como era de esperarse, los pilotos del equipo M-Sport tuvieron una opaca actuación en el reinicio del Campeonato Mundial de Rally (WRC) en Estonia. Sin una preparación ideal por un tema presupuestario (no hicieron demasiadas pruebas ni carreras previas como sus rivales), las tripulaciones de los Ford Fiesta si bien no fueron un desastre en cuanto a resultados, vivieron una competencia algo frustrante al no contar con el ritmo adecuado ni siquiera para luchar por estar en puestos de podio. En cambio, Teemu Suninen, Esapekka Lappi y Gus Greensmith lucharon en la parte trasera de los diez primeros, lejos de los hombres del Hyundai Motorsport y del Toyota Gazoo Racing.
Ahora se viene el Rally de Turquía, con otro tipo de camino de tierra, mucho menos rápido y repleto de piedras que suelen causar más de un dolor de cabeza y contratiempo. Y el director del equipo M-Sport, Richard Millener, quiere que sus pilotos vayan con un enfoque más positivo a esta cita. “Hubo cierto grado de caída en Estonia. Y no queremos ver más de eso. Todos sabemos dónde estamos, todos sabemos las restricciones (presupuestarias) que enfrentamos y tenemos que seguir adelante”, indicó.
“Históricamente, M-Sport ha construido autos confiables, rápidos y fuertes y creemos que el Fiesta no es diferente”, agregó el británico en DirtFish.
Desde que Turquía regresó al calendario WRC en 2018, Suninen ha sido el mejor exponente del M-Sport con dos cuartos puestos en las últimas dos temporadas. Mientras que en 2019 Lappi sorprendió al ser segundo pero al mando de un Citroën C3 WRC. “Es vital que vayamos allí con un estado de ánimo positivo. Turquía puede ser un rally loco en el que puede pasar cualquier cosa y necesitamos que los muchachos vayan lo suficientemente rápido como para estar allí en la mezcla”, cerró Millener.
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