Tras los podios en La Rioja y Córdoba, Augusto D´Agostini disfruta de un gran presente en el Rally Argentino y eso lo motiva a ir por más. “Estas dos carreras me han demostrado que sí se pude”, admitió el catamarqueño en el pasado capítulo de #CharlasDeRally de Entre Motores. “Es hora de regalarle un triunfo al equipo y prendernos en la lucha por el campeonato”, sostuvo el piloto del Baratec.
Parece que el famoso dicho “la primera impresión es la que cuenta” tiene sus excepciones. En el Rally de La Rioja 2022, Augusto D´Agostini vivió su estreno al mando del Skoda Fabia Rally2, aunque ese primer contacto no fue para nada alentador; más bien todo lo contrario. “La pasé mal; di dos vueltas complicadísimas en el shakedown, poniendo mal los cambios. Recuerdo que Alejandro Cancio estaba justo ahí y le comenté: ´La verdad que no le encuentro el ritmo al auto y voy haciendo cagadas por todos lados…´. Y me contestó: ´Tranquilízate. Divertite, manejalo como te parezca y maltratalo´, porque la verdad que lo estaba cuidando mucho al auto al ser nuevo también. Entonces lo maltraté como quien dice, hice lo que tenía ganas y salió el tiempo, así que ahí me di cuenta que la forma de llevarlo es como tengo ganas, ja”.
“No me había convencido para nada al principio. No le encontraba el ritmo ni la forma de manejarlo, algo que es clave. Pero después de esos tips todo mejoró”, reconoció el piloto catamarqueño que fue otro de los invitados que pasó por un nuevo capítulo de #CharlasDeRally a través del Instagram de Entre Motores. Y quedó demostrado que las cosas cambiaron: ganó el primer tramo cronometrado en la cita riojana, terminó tercero en la general y para ratificar que eso no fue casualidad después se dio el lujo de ser segundo en el reciente Rally de Argentina. Dos carreras y dos podios. Nada mal para hablar de estadísticas con este nuevo vehículo, ¿no?”.
“Estamos disfrutando este presente. El auto es extraordinario, se comportó de diez, sin fallas, y pudimos disfrutar de correr y andar rápido”, resaltó el piloto del Baratec. Y remarcó las diferencias respecto al Maxi Rally que venía manejando: “Con el Rally2 hay que estirar un poquito más los cambios, se maneja más como un aspirado que como un turbo. Lo que más me costó fue la velocidad de curva, que tiene mucha, y la verdad que al principio se me complicó un poco. Pero me fue llevando a ir animándome un poco más. Me sigo animando, habrá que ver hasta dónde... Cuando veas a los mecánicos arreglando el techo es porque hasta ahí llegó ese poquito más, ja”.
¿En qué aspectos aún hay cosas para mejorar? “Cometo quizás muchos errores en curvas que en este auto son a fondo. Tengo que saber, a la hora de hacer la hoja de ruta, cuáles son a fondo sin nada de freno. A veces uno pone a fondo menos y con este auto es a fondo. En la segunda pasada corrijo esos detalles y por eso bajo mucho el tiempo. Debo asimilar eso, de saber que tengo que tirarme a fondo y que el auto va a doblar”, respondió. “Cuando logre hermanar todo eso: la hoja de ruta y la velocidad del auto, van a empezar a salir mejores tiempos. Lo bueno es que no soy apresurado. Todo es paso a paso. Si me tiro con todo de entrada, capaz que rompo un auto y eso no es bueno. Lo que me falta es sumar kilómetros, por eso prefiero guardarme ese poquito”, agregó.
Pero este salto de calidad que ha exhibido D´Agostini en este último tiempo no se debe solamente al cambio de auto: “Las mejoras son producto de varios factores. Primero y principal sin dudas es la cabeza; es el factor clave. Yo a la velocidad antes la tenía, era rápido en algunos tramos y andaba en punta, mientras que en otros terminaba muy atrás. Había que acomodar algo que estaba suelto en la cabeza, ja. Estuve trabajando con un sicólogo deportivo, que me ha enseñado varias cosas; no todo en la vida es velocidad y a fondo; me dio un par de tips que fueron fundamentales. Mi navegante (Juan Pablo Carrera) también es medio mi sicólogo, me ha hecho madurar bastante. Y además hice un curso de manejo con el piloto francés Eric Camilli para implementar mejoras en cuanto a hoja de ruta, a cómo andar más rápido. Son varios factores, pero el principal es la cabeza. No sé si la habré acomodado del todo... Han quedado algunos cables sueltos seguramente, ja”, respondió.
Y Augusto no dudó en afirmar que la misión para este 2022 se modificó tras los dos podios al hilo: “Sí, estos dos buenos resultados me cambian el objetivo totalmente. Hemos visto que se puede. Esto del rally es un camino muy difícil. Nadie se sube y gana una general. Lleva muchos kilómetros, mucho tiempo, mucho esfuerzo… Ya tengo un buen tiempo arriba de un auto. El año pasado me perjudicó un poco el problema del hombro, aunque a su vez eso me dio mucha fuerza a nivel mental. Y estas dos fechas me han demostrado que sí se puede, que el potencial está y el equipo Baratec es extraordinario, ya que al auto no se le ha aflojado ni un tornillo. Tengo la confianza del equipo, del navegante... Entonces depende del piloto. Con el conjunto bien cerrado, vamos a ser una tripulación a vencer. Hoy estamos cerca. Hemos peleado la punta, a poco tiempo de ganar. Cuando corrijamos ese par de detalles y me tire en esos que son a fondo, seguramente la lograremos”.
Está claro que D´Agostini tiene su primer festejo grande entre ceja y ceja. “La victoria la siento muy cerca. Este auto me gustó. En la que viene saldremos a ganar, nada de especular. Es hora de regalarle un triunfo al equipo, estar en lo más alto y prendernos en la lucha por el campeonato. Ahora se viene el Rally de Cutral Co y Plaza Huincul, prueba que me cuesta porque soy un piloto que busca referencias claves y ahí no hay. Pero las ganas están. Sabemos que nos tendremos que tirar, tal cual lo hacen los de punta, y estoy dispuesto a hacerlo. Vamos por el buen camino y hay que seguir así”, cerró.
Fotos: Rally Argentino
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